Bajo una persistente lluvia y un cielo muy nublado, decenas de personas pertenecientes a organizaciones e iglesias cristianas se congregan la tarde de este sábado frente al Congreso Nacional en reclamo de que el Código Penal que conoce el Senado sea aprobado con el mismo texto que remitió la Cámara de Diputados.
Líderes religiosos, como el pastor evangélico Ezequiel Molina Rosario, de la Batalla de la Fe, respaldan el proyecto de Código tal cual se ha redactado y lo consideran necesario para tipificar delitos que no están contemplados en la legislación vigente, como el uso de ácido del diablo, el sicariato, entre otros.
Para ellos, el argumento de que el referido código no se puede aprobar porque no ha sido leído, es una excusa para introducir la “agenda LGBTIQ” y el aborto.
Entienden que las minorías que promueven esos temas “fueron derrotadas en la Cámara Baja y no deben pretender imponerse”, y consideran el proyecto de Código Penal correcto en el castigo de la corrupción y la discriminación a todos los niveles.
Con paraguas abiertos, y portando -muchos de ellos la bandera nacional- católicos y protestantes tocan cornetas y gritan consignas. Una patana con grandes equipos de sonido alimentado por una planta eléctrica rodante ha sido apostada en el lugar.
La manifestación está programada hasta las 6:00 de la tarde.