Hoy en día, y como consecuencia de la pandemia que estamos viviendo, muchas personas trabajan a distancia desde la comodidad de sus casas.
Aunque es cierto que la modalidad virtual tiene ciertos beneficios, también puede convertirse en un aspecto negativo para nuestra salud.
Una gran cantidad de personas se han vuelto menos activas físicamente desde el comienzo de la pandemia.
Los teletrabajos nos han obligado a pasar días enteros sentados y encorvados frente a un ordenador llegando a producir dolores de espalda, cuello y hombros.
Una de las recomendaciones principales para las personas que teletrabajan es mantener el cuerpo en movimiento.
Deberás aprovechar cualquier oprtunidad para mover el cuerpo como al atender llamadas telefónicas, subir y bajar escaleras cuando sea necesario e incluso cambiar de posición mientras estés sentado.
No necesariamente debes movilizar tu cuerpo con ejercicios físicos cardiovasculares o de fuerzas, se trata de incorporar movilidad y estiramiento a tu rutina diaria.