Los talibanes afirmaron el domingo que habían ganado terreno en el valle del Panshir, último gran bastión de resistencia armada al nuevo gobierno de Afganistán, donde, según Washington, podría desencadenarse una guerra civil.
Desde que el 30 de agosto las tropas estadounidenses abandonaron el país, las fuerzas del movimiento islamista han lanzado varias ofensivas contra este valle, enclavado a unos 80 km al norte de Kabul y de difícil acceso.
El valle del Panshir es un viejo bastión antitalibán, al que el legendario comandante Ahmad Shah Masud dio a conocer a finales de los años 1990, antes de ser asesinado por Al Qaida en 2001.
En la actualidad, da cobijo al Frente Nacional de Resistencia (FNR).